Hablar con los padres o seres queridos acerca de la necesidad de contratar personal de cuidado en el hogar puede ser una conversación difícil para ambas partes.
Para ellos, representa una pérdida de independencia y una confirmación de la declinación de su salud. Para usted, puede ser difícil porque ahora siente la responsabilidad y la carga de comunicarle a su padre o su ser querido esta noticia.
Todos los seres humanos, jóvenes o adultos, nos abrazamos firmemente a la idea de la independencia, queremos sentirnos fuertes para siempre y negamos cualquier evidencia de deterioro y que ya no hay posibilidad de seguir manejándonos solos. En este contexto, en general el adulto mayor que está necesitando cuidado de salud en domicilio será el último en reconocer la situación.
Es entonces cuando algún miembro de la familia, en general asesorada por el médico del adulto mayor, tiene que tomar la iniciativa para tener una conversación que le muestre la realidad de su pérdida de independencia.
Esto puede ser muy doloroso, así que aquí van unos consejos para que este proceso sea lo más suave y natural posible.
1. Háblelo con tiempo
Sería ideal que esta conversación se tuviera antes de que se necesite con urgencia. Por ejemplo, cuando el adulto mayor aún pueda valerse por sí mismo, pero el calendario muestre el inflexible paso del tiempo podría comenzarse preguntando: “Mamá, ¿dónde desearías envejecer?” o “¿qué te parece contratar a alguien para que te ayude en los quehaceres domésticos?”. La mayoría de las familias dejan esta conversación para cuando la crisis de salud está muy avanzada y la decisión debe tomarse con inmediatez.
2. Hable primero con el resto de la familia
Si usted ha sido la persona a quien el médico ha advertido sobre la necesidad de un cuidador a domicilio, o si la inquietud nace por su propia iniciativa, organice una reunión con el resto de la familia. Incluya en la reunión a los adultos y a los niños, e incluso a algún amigo/a muy allegada a sus padres. Acuerden qué tipo de ayuda buscarán, qué perfil de profesional, por cuántas horas y conversen sobre cómo afrontarán los gastos. Decidan quién hablará con su padre o madre: que no sea más de una o dos personas, para que no se sienta avasallado.
3. Tenga paciencia
Comience planteando preguntas tangencialmente sin abordar el tema por completo. Por ejemplo: “Papá, ¿qué tal te va con cuidar a mamá las 24 horas?” o “Hoy me encontré con la vecina que estaba paseando con una simpática cuidadora”. Vaya analizando el terreno. No inicie nunca la conversación con un “Hemos decidido que ya necesitas alguien que te cuide”.
4. Garantícele libertad e intimidad
Si su padre o madre han sido siempre independientes, puede rechazar la ayuda aun cuando haya habido problemas obvios como caídas, desmayos, etc.
Ellos verán esta conversación como la confirmación de que ya no podrán hacer nada por sí mismos. Usted puede garantizarle que seguirá haciendo esas cosas que le gustan, como cocinar, pasear, etc. Es muy importante que el adulto mayor sea respetado en su necesidad de libertad e intimidad. Si su madre aún puede bañarse sola, asegúrele que podrá seguir haciéndolo o que una de sus hijas o mujeres cercanas la ayudará.
5. Hable de “conveniencia”, no de “necesidad”
Especialmente cuando hay signos de deterioro mental, el adulto mayor puede tomar actitudes de rechazo infantiles. En la conversación, no use palabras como “enfermera” o “ayuda médica” sino “ama de llaves” o “ayuda doméstica”.
6. Enfóquelo como problema de seguridad
Si ha habido algún delito en el vecindario, comience la conversación diciendo que le preocupa que el adulto mayor esté solo y que sea víctima de un asalto. Si hubo algún accidente doméstico, como olvidos o caídas peligrosas, menciónele estos eventos, pero sea siempre sutil.
7. Pida consejo a un profesional
Si una conversación inicial ha fracasado, no se dé por vencido. Puede ser que necesite pedirle a otro miembro de la familia que tenga esta conversación, o háblelo con el médico de cabecera. El adulto mayor respeta muchísimo su opinión y si éste lo sugiere, lo aceptará. También las agencias de personal de cuidados mayores pueden ofrecerle asesoramiento profesional.
Referencias:
-HomeCare.com
-Inside Elder Care